Estamos ante una obra que, a partir de lo poético, se despliega por otro tipo de géneros y de moldes, impregnados todos ellos por ese peculiar humanismo poético, que es uno de los rasgos que mejor define el quehacer creativo de Antonio Colinas. En este sentido, en nuestra poesía contemporánea, solo conocemos otro poeta, como es José Ángel Valente, cuya creación obedece a tales rasgos, ya que, desde el centro irradiante de lo poético, cultiva también otros géneros literarios diversos, todos ellos conectados entre sí.